A pedido del Santo Padre rezamos a la Santísima Virgen por la Santa Iglesia de Cristo:
"Bajo tu amparo nos acogemos, santa Madre de Dios;
no deseches las súplicas que te dirigimos en nuestras necesidades,
antes bien, líbranos de todo peligro, ¡ oh, siempre Virgen, gloriosa y bendita!
ELEVAMOS LA ORACION A SAN MIGUEL ARCÀNGEL poniendo bajo su especial protección a la Santa Iglesia Católica Apostólica Romana, al Sumo Pontífice, a los Grupos de oración de Padre Pio,y a los sacerdotes asistentes espirituales parroquiales.
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla.
Sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio.
Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los otros espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas.
Amén."
En el nombre del Padre, y del hijo , y del Espíritu Santo, Amén
San Pio de Pietrelcina,
Ruega por nosotros